jueves, 28 de abril de 2011

Afrontamiento cognitivo situacional

El estrés debe afrontarse, o sea, debe "hacerse algo", lo contrario de "dormir".
Pero ese hacer puede ser en el mundo o en el propio interior de la persona. Es decir, puede cambiarse el significado que le damos a los estímulos que creemos superan nuestra capacidad de respuesta.
Sólo un ejemplo cortito, sin tiempo para escribir como quisiera en el blog, o me estreso o cambio activamente el modo de entender esta "dificultad". En este caso, cuestionando mi "obligación" de hacerlo, o desprendiéndome de la opinión que eso genere en los eventuales lectores.
Es decir, cambio y compruebo que no escribir no era algo "estresante" si le daba un significado más rico y funcional.
Por eso, en este rato libre escribo estas líneas, relajado y en paz.

jueves, 21 de abril de 2011

El estrés no mejora durmiendo!!

El estrés se produce cuando nos vemos superados por exigencias o demandas que no podemos satisfacer o lo hacemos con un gran esfuerzo.
Todos tenemos una intuición de lo que es el estrés. Sin embargo, como decíamos en la primera parte, no siempre hacemos lo adecuado para superarlo.
-¿Hacer que? ¡Sólo quiero dormir!
ESO ES UN ERROR! También lo es suponer que el sólo descanso será suficiente.
-¿Entonces qué?
Las respuestas ante el estrés se llaman AFRONTAMIENTO.
El no hacer nada, es un afrontamiento pasivo, y casi nunca sirve.
El escapar, es una afrontamiento evitativo, y sirve sólo a veces.
EL ESTRÉS SE DEBE AFRONTAR DE UN MODO ACTIVO. Hay mucho qué hacer, sobre las demandas o el modo de entenderlas, y sobre las capacidades o recursos para hacerles frente.
Es complicado? No tanto, todo se resume en el título:
"EL ESTRÉS NO MEJORA DURMIENDO"!!! DEBEMOS OCUPARNOS!!!
Si nada cambiamos, seguiemos sintièndonos igual. En ese sentido, es que debemos tener un afrontamiento activo. De a uno, veremos cuáles son.
Mientras tanto, a aprovechar la Semana Santa, bien despiertos, eh?

domingo, 17 de abril de 2011

¿Sólo vale coincidir?

Acabo de escribir en un blog amigo. Dudé de hacerlo, porque disentía en parte con la propuesta. Pero decidí que expresarme sinceramente era un buen homenaje a la nota y a su autor, siempre en una búsqueda honesta de aportar algo.
Hay blogs y foros dónde sólo se discute, torpemente, defendiendo más el propio ego que la búsqueda de la verdad y el consenso. Pero, por el otro lado, tampoco sería sano, coincidir en todo, siempre, no?
¡Cómo cuesta disentir cuándo tenemos afecto y valoración por el otro! Sin embargo, si eso es verdadero, el intercambio sólo puede enriquecer. Por eso, amigos, con cariño y respeto podemos, y casi digo debemos, ser sinceros.
Escucho todo lo que tengan para decirme...

miércoles, 13 de abril de 2011

El estrés no mejora durmiendo!

Es sabido que si las exigencias ambientales nos superan tenemos estrés, como un esfuerzo para adaptarnos. Esa adaptación nos "activa" como si tuviéramos que dar una respuesta física de pelea, tal como ocurría en la época de las cavernas. El tema es que ahora nos estresan cosas que no requieren esfuerzo físico, pero nuestro cuerpo sigue respondiendo igual.
Muy escueta es esta explicación pero sirve para darnos cuenta que lo que tenemos que descansar es la mente, no el cuerpo. Por qué? Porque la mente se agota por el exceso de atención, falta de descanso, anticipación, etc. El cuerpo en tanto se agota innecesariamente, pese a no utilizarse más que mínimamente.
¿Qué hacemos entonces? En general tenemos respuestas inadecuadas, tales como tomar cafeina, sobrestimularnos con televisión y otras yerbas, etc. mientras ponemos nuestro cuerpo inactivo...a descansar! Todo al revés!
¿Qué deberíamos hacer?
Bajar el estímulo físico inapropiado comiendo bien o no intoxicándolo y aumentar la actividad física, mientras ponemos la mente en reposo.
O sea, nada de TV tirados como morsas en la cama porque estamos "cansados", mientras comemos o tomamos porquerías. En vez de eso, algún ejercicio físico, aunque sea caminatas y silencio o buena música. Ya relajados, una conversación o momento compartido, o un libro que nos lleve a otros lugares que valgan la pena.
Por no extenderme, la idea es descansar la mente y activar el cuerpo en lugar de descansar innecesariamente el cuerpo y seguir con la mente a full.
Vale la pena probarlo. Hoy lo empiezo.

jueves, 7 de abril de 2011

Emoción y Razón

La complementariedad entre la emoción y la razón enriquece notablemente las posibilidades humanas. Aunque, a veces, el predominio intenso de una parece ocultar a la otra, o sesgarla fuertemente. Como no es sólo el instinto el que nos mueve, a cada paso debemos tomar decisiones, la mayoría de las veces lo hacemos en forma casi automática, pero otras debemos detenernos un rato, y allí, la complementariedad mencionada puede transformarse en lucha. Cuando esto sucede, parece mejor retirarse un poco antes de decidir ya que las respuestas inmediatas suelen ser dominadas por la emoción. Algo de tiempo y distancia cambia la menera de entender las cosas, para bien y/o para mal. Pero acercar y coordinar ambas partes es clave si queremos vivir plenamente. Aunque ese acercamiento sea a veces sólo aceptación mutua, como dos buenos amigos que sienten/piensan distinto sin afectar para nada esa amistad.

lunes, 4 de abril de 2011

Prioridades, tecnoestrés, ...

Es complicado cuando el tiempo es escaso. Y siempre, en alguna medida lo es. Por eso las prioridades deberían guíar su utilización. Racionales y anímicas. En forma natural y serena. Aprender a bancar lo que no se puede, es tan importante en este tema como en cualquier otro. La finitud humana se expresa a cada paso. Sus potencialidades también. Cara o cruz. Cara y cruz.

Entre otros recursos, la tecnología puede ayudarnos a mejorar nuestro rendimiento. O jugarnos en contra. Para lectores ansiosos y no tanto, les paso un link sobre el tecnoestrés del Clarin de ayer. Una nota que ya había adelantado en este blog. Tal vez sea un poco sintética, pero lo contenidos son abundantes: http://www.ieco.clarin.com/tecnologia/epoca-tecnoestres_0_228000020.html
Beso/abrazo