viernes, 29 de mayo de 2009

Honestidad y autoexámen

Evidentemente el tema de la honestidad requiere una autoevaluación sincera. Si lo hacemos, seguramente encontraremos muchas faltas en nosotros mismos. Con paciencia y serenidad deberíamos tener a la vez una firma decisión de corregirnos. Jamás lo lograremos totalmente, pero nuestra lucha, invisible para los demás, nos hará mejores y más dignos. Esa autoevaluación nos enseñará también a ser más tolerantes con los demás. 
Aprender a ver, juzgar con humildad y firmeza los actos y no las personas son pasos necesarios para que nuestra propia acción sea posible. La satisfacción interior del esfuerzo también nos permitirá disfrutar más plenamente de todo lo bueno que hacemos y recibimos. Hasta pronto. JMB

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Somos como una máquina, necesitamos un service, por eso coincido que debemos autoevaluarnos, pero contando también con ayuda de un profesional, de un amigo sensato, pero a corazón y mente abierta, para mejorar, lo corregible, aeptando con humildad las diferencias, buscando siempre la verdad.
Entiendo que así se vive mejor.

Ana María Paz

Ines B. dijo...

Pero Juan, si los actos son producto de las personas, como separamos?
Con seguridad me resulta mas facil y sincero juzgar mis propios actos ya que se si soy honesta o no, pero como hacer para con los demas?
En lo particular primero observo, me tomo mi tiempo, que es bastante te dire, y luego juzgo. No se si es lo que se debe hacer , solo se que es lo que puedo hacer.

Un cariño Ines