domingo, 23 de noviembre de 2008

Copa Davis

Triste espectáculo fue la conferencia de prensa luego de la derrota en la Davis. El periodismo muchas veces confunde sus objetivos, de informar lo más objetivamente posible y con un sentido constructivo. Corrillos, versiones, chismes baratos no informan ni ayudan a nadie. Se perdió un partido, no una guerra. ¿Podemos pasar del exitismo  a la idea de fracaso estrepitoso en pocos días? Lo que ahora se evalúa negativamente, ¿por qué no se lo dijo antes?
Importante es el deporte, mucho más es hacerlo, verlo y comentarlo en forma limpia. En el éxito y en la derrota. El equilibrio no parece ser una de la mejores virtudes de muchos argentinos. Propongo que empecemos a buscarlo, en lo público y también en lo privado, donde la mayoría de la gente juega finales todos los días.

1 comentario:

Quique Figueroa dijo...

Y Juano, el argento agorero derrotiste, es un fantasma que ronda semper. Máxime en las redacciones de los diarios, las radios, y todo medio que se precie de "fashion".
Afortunadamente no ví la conferencia en cuestión. Ví buenos partidos, con el amable e inteligente comentario de Gonzalo Bonadeo [ojalá hubiese un par de comunicadores como él].
Me encantó de la jornada final, el esfuerzo de Chucho, y el gesto de los ibéricos aplaudiendo al público. Le dije a Chucho [mi Benjamín]: esos es el deporte.
Pero el lauro se lo lleva Del Potro, quien hizo lo que pudo el viernes, y con mucha lógica declaró, que esto era nada más que un partido de tenis, que hay cosas mas importantes en la vida. A Dios, lo que es de Dios, y al César, lo que es del César ..