lunes, 24 de agosto de 2009

Fútbol y vida limpia

Los que jugamos al fútbol cada vez estamos más decepcionados por ver lo que pasa en el fútbol profesional. Así como creo que el deporte, además de sus múltiples ventajas, es una metáfora de la vida (como he escrito ya en este blog), lamentablemente el deporte en el espacio público también es un reflejo de nuestra sociedad. Casi nada es por el bien común, la educación de los niños, la promoción de la salud, etc. Por eso casi ni existe el deporte amateur excepto las gigantescas gestas de muchos atletas inadvertidos para los medios masivos excepto cuando el éxito los convierte en noticia que vende y en el esfuerzo de muchos docentes de alma. Sí interesa, y mucho, el fútbol profesional, lleno de mentiras, mafias y manipulaciones. Sobre todo porque es un enorme negocio (aunque los clubes estén fundidos).
Los amantes del fútbol solo podemos sentir asco de lo que se hace en su nombre en el ámbito profesional, donde la pelota ya está tan manchada que casi ni se la reconoce. Por eso, reivindico jugar a la pelota, con viejos amigos y con muchos para hacer, donde los códigos pueden ser nobles. Reivindico también la idea de aplicar en el fútbol amateur, como en todos los deportes, las ideas positivas y nobles del juego en equipo, la solidaridad, la entrega, la caballerosidad, la grandeza en la derrota, la generosidad en el triunfo, la aceptación de las reglas, la verdad. En definitiva el juego limpio que tanto necesitamos para nuestras vidas y para nuestra sociedad. Esta noche espero disfrutarlo como siempre y olvidarme un poco de tanto desatino, para limpiar un poco mi espíritu. JMB

2 comentarios:

delivery post-crucifixión dijo...

Muchas veces pienso en esto mismo. Lamentablemente al fútbol le están quitando su espíritu. Sigo viendo algún que otro partido pero sé que el deporte está siendo cada vez más manipulado.

Tengo un libro que compre hace unos años. Se llama "Historia del fútbol amateur", y cuenta sus inicios en la Argentina. Desde fines del siglo XIX. hasta la década del 30. Son muy buenas las anécdotas. Y allí se muestra el más grande equipo argentino de todos los tiempos: Alumni. Se destaca en este equipo (amateur); su caballerosidad, su hidalguía, su pasión, su espontaneidad y su "vida limpia".

Todo un ejemplo. Sería bueno que algún dirigente lo leyera, aunque creo que no lo entendería. Como no entienden muchas cosas...

Sigamos con la nuestra, Juán Manuel. Quién te dice que tal vez algún día retorne, de modo renovado, ese espíritu que los grandes negociados han ahuyentado.

Un abrazo!

Ricardo

Anónimo dijo...

No desesperen futboleros seguro que algún dirigente los va a escuchar o tomar el ejemplo de Uds. que tratan de transmitir el sentido del deporte. Hay que llegar a ser dirigente en lugar de estos para llevar a cabo estas ideas, vivencias y ganas de que todo cambie.
Saludos.