viernes, 21 de agosto de 2009

Queremos cambiar o llorar?

Si leemos las tapas de los diarios o los títulos en los noticieros sentimos bronca, indignación e impotencia. Releerlas cada rato en conversaciones y lamentos inútiles no sirve más que para victimizarse y regodearse en el malestar. Entonces?
Creo que hay que informarse correctamente para lo cual se necesitan diversas fuentes, luego hay que ser honestos en la crítica: lo que está mal para unos lo está también para los otros, lo mismo que lo opuesto. Quiero decir, por ejemplo, que la violencia no es más o menos válida según de quien provenga, las ambiciones personales tampoco. Finalmente, si queremos cambiar las cosas debemos comprometernos y entrar a la cancha. A menudo noto que se trata de "convencer" a los que ya piensan parecido con lo cual la acción carece de sentido y solo implica pérdida de energía. Hay que transmitir ideas y conductas fuera del ámbito habitual en que nos movemos. Es más difícil, pero indispensable si lo que nos interesa es mejorar y no llorar como niños contrariados. Por último, debemos ganarnos la autoridad moral que nos da ser ejemplo de lo que predicamos. Animo! Con compromiso, coherencia e inteligencia se puede cambiar. JMB

4 comentarios:

Quique Figueroa dijo...

Sabes que no logro ver un mísero noticiero nuestro entero ..
Mirá que me lo exigen en locución, precisamente para saber como se debe hacer. Pero, creo que la tv muestra exactamente lo contrario, en lugar de informar, te pega en la sensiblería, y el hecho en si pasa desapercibido. Por eso opto por mirar noticieros de la TVE, la RAI, o la BBC, o el resumen internacional de los sábados del 7. No quiero llorar, pero la mayoría de los informativos (televisivos o radiales), llevan la lágrima o la bronca a flor de piel. Te acordás del Reporter Esso? (yo tampoco, pero mirad en Internet). En 15' daba un conciso resumen de la realidad. No hace falta mas que eso ..

delivery post-crucifixión dijo...

Juán Manuel: yo me he formado el hábito de no mirar los informativos por la noche, y ya pasadas las 23hrs, ni hablar.

A los diarios los veo de pasada, escucho radio por la mañana y veo un poco de tele al mediodía. Eso me basta para estar informado.

Creo que es una estrategia terapéutica para no ir a dormirse con mala onda.

Creo que la única manera de generar cambios es empezar por el diálogo. Aunque no se esté de acuerdo, conversar (inclusive discutir) puede ser muy productivo.

Yo trato de abrir mis opiniones para cualquier sector (izquierda, derecha, creyentes, escépticos y ateos). No tengo problema en sentirme a debatir con un nacionalista o un comunista.

Creo que vos también tenés esa apertura, pero somos pocos. Y no es fácil. No hay lllorar, insistir aún a riesgo de equivocarnos. Es preferible eso y no quedarse mudo.

Un abrazo!

Ricardo Pobierzym

Juan Manuel Bulacio dijo...

Gracias amigos, por sus comentarios! Los valoro mucho! JM

Anónimo dijo...

Desiderata
(es bueno recordarlo)

Camina plácido entre el ruido y la prisa y piensa
en la paz que se puede encontrar en el silencio.
En cuanto te sea posible y sin rendirte, mantén buenas relaciones con todas las personas.
Enuncia tu verdad de una manera serena y clara; y escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante;
también ellos tienen su propia historia.
Esquiva a las personas agresivas y ruidosas, pues son un fastidio para el espíritu.
Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado,
pues siempre habrá personas mas grandes y mas pequeñas que tú.
Disfruta de tus éxitos lo mismo que de tus planes.
Mantén el interés en tu propia carrera por humilde que sea,
ella es un verdadero tesoro en el fortuito cambiar del tiempo.
Se cauto en los negocios, el mundo esta lleno de engaños;
mas no dejes que esto te deje ciego para la virtud que existe.
Hay muchas personas que se esfuerzan por alcanzar nobles ideales,
y por doquier la vida esta llena de heroísmo.
Se sincero contigo mismo. En especial, no finjas el afecto;
tampoco seas cínico en cuanto al amor; pues en medio de todas las arideces y desengaños,
es perenne como la hierba.
Acata dócilmente el consejo de los años, y abandona con donaire las cosas de la juventud.
Cultiva la firmeza del espíritu para que te proteja en las adversidades repentinas,
pero no te afligas imaginando fantasmas.
Muchos temores nacen de la fatiga y la soledad.
Sobre una sana disciplina se benigno contigo mismo.
Tú eres una criatura del universo,
no menos que las árboles y las estrellas; tienes derecho a existir.
Y sea que te resulte claro o no, indudablemente el universo marcha como debiera.
Por eso debes estar en paz con Dios, cualquiera que sea tu idea de El,
y sean cualesquiera tus trabajos y aspiraciones.
Coserva la paz con tu alma en la bulliciosa confusión de la vida.
Aún con toda su farsa, penalidades y sueños fallidos, el mundo es todavia hermoso.
Se alegre. Esfuérzate por ser feliz.

Encontrado en la Iglesia de Saint Paul de Baltimore, en 1692.


Ana Marìa Paz