domingo, 16 de agosto de 2009

Valoraciones racionales?

Con los deportistas, políticos, actores y cualquier personaje público suele pasar lo mismo. Entusiasman cuando son jóvenes o nuevos, evolucionan en la consideración de los otros según gustos y actuaciones y despiertan admiración en la vejez y aún más luego de la muerte, resaltándose particularmente aquellos aspectos que lo distinguieron y dejando pasar u olvidando los negativos. Así de subjetiva es la valoración humana, así de irracional. Lo mismo se observa ante el éxito, merecido o no, y el fracaso. Si bien entiendo esas tendencias afectivas que ejemplifiqué, como hombres a veces tenemos que ponernos más allá de ellas. Aprender a valorar más racionalmente nos elevará en nuestra condición humana y nos acercará a valores más justos y duraderos.
¿No es importante acaso ser un tenista 200 del ranking durante varios años o un funcionario público eficiente (todavía quedan algunos) aunque no famoso? ¿no valen los excelentes artistas que cantan en bares y se matan por sacar un disco? ¿Cuál es el mérito de llegar a la vejez con un cargo político si lo que se ha hecho no es valioso en sí mismo para la comunidad? ¿Por qué nos enternece un niño y rechazamos a un viejo que fue niño alguna vez?
Aclamamos a "mediáticos" vulgares y no reconocemos escritores, deportistas, filósofos (reales), docentes, médicos y así hasta el infinito. ¿Dónde quedan en estas valoraciones las supremas necesidades éticas y estéticas que nos distinguen como seres humanos? Sin juicio crítico seguiremos pensando, sintiendo y actuando cómo los medios de comunicación nos digan que lo hagamos.
Educar es estimular el desarrollo de lo mejor del ser humano, donde se destacan particularmente el desarrollo del juicio crítico y la honestidad. Y todos somos, en alguna medida, educadores, de otros, o más difícil aún, de nosotros mismos.

2 comentarios:

Quique Figueroa dijo...

Juano, nuestras valoraciones suelen ser mas emocionales que racionales, como así también gran parte de los actos de nuestra vida (sino tendrías menos laburo). El problema (selon moi), es cuando razón y emoción van por caminos tan disjuntos dentro de uno, que jamás se encuentran. O cuando no podemos administrar nuestro juicio de valor sobre algo o alguien, antes de leer en los diarios o escuchar en la tele que dice la Chiqui Legrand al respecto ..
Respecto de los deportistas: valoro enormemente el mérito de Del Potro y de tantos otros laburantes, no debemos exigirles triunfos constantes, sino reconocerles la trayectoria que vienen llevando. Pero, eso no vende. Es como enrostrarle a Tiger que ayer perdió por segunda vez en 13 años ..
Para mi es destacable el triunfo del coreano, y también que un ser humano como Woods haya obtenido una marca como esa: 13 años!
Artistas, que puedo decir .. Tipos como el Mono Villegas, o el Cuchi Leguizamón, o Eduardo Lagos, se van a la tumba, habiendo grabado escasos, escasísimos discos.
No hablo ya de fama, sino de reconocimiento o valoración del público.
No tengo respuestas, solo interrogantes ..
Y esto de los artistas no es trivial, porque ellos nos pueden dar gran energía, seleccionando la música a escuchar. Algo que hace magistralmente Hétitor Larrea, cada mañana en "Una vuelta nacional" , y algunos otros conductores que nos dan ganas de abrir un ojo o abrir un oído para escucharlos, o esperar a que llegue el mes de septiembre, para escuchar el trinar matutino de los pájaros. Pero, nuestra alma necesita abrevar en un buen lugar para saciar su sed.

Anónimo dijo...

To be on TV,
to be...


Un abrazo. Ema.