lunes, 31 de agosto de 2009

Cansancio físico?

Tal vez sintamos un poco de "cansancio mental" de tanto en tanto y no sería raro que se acompañe de un "cansancio físico".
Más allá de las causas del primero, la mayoría de las veces, el segundo no se justifica por un esfuerzo físico importante. ¿De dónde proviene entonces? Dos conceptos sencillos pueden ayudarnos a entenderlo y, sobre todo, a remediarlo.
La actividad mental y la presión que sentimos podemos llamarlas "activación" y en un estado primitivo se acompaña de la necesaria "activación física" necesaria para la lucha por la supervivencia (tensión muscular, aumento de la frecuencia cardíaca y respiratoria, etc). Ocurre que en la vida moderna actual dicha activación física es inútil para mejorar nuestros desempeños y nos lleva a un "cansancio físico" sin el correspondiente esfuerzo (es como acelerar un auto en punto muerto o pedalear en el aire).
¿Qué hacemos entonces para remediar esta evolución biológica aún en deuda?
Aquí va parte de la receta: cansarnos físicamente de verdad, es decir, hacer deportes o actividad física. Este cansancio se recupera durmiendo (cosa difícil si es sólo mental).
DEPORTES Y BUEN DORMIR. Parte de un camino de vuelta hacia lo natural y hacia el equilibrio en nuestras vidas.
Es simple, no? Y sin embargo...(mañana la seguimos, si no se me hace muy tarde después de mi partidito del fútbol de padres. Hoy después del gimnasio compartido con mi hijo mayor ya estoy listoooo.......

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me animo a agregar que un baño caliente ayuda mucho a desconectarse. Si estás 15 minutos bajo la ducha es difícil que después no te quieras ir a dormir.
También es fácil y efectivo. J.M.

Rocío dijo...

Que importante que es dormir y hacer ejercicios! hay que intentar ahcerlo simpre que se pueda. Además, me gustaría comentar una pequeña experiencia personal. A lo largo de 5 años que estuve estudiando y trabajando, me he visto desbordada en muchas oportunidades, por no poder o no saber desconectar en el tiempo justo que mi cuerpo lo ha pedido. Un día, al llegar a mi trabajo con el tiempo justo para iniciar mi jornada laboral, me dí cuenta, al no poder hacerlo, lo importante que es para mí poder tomar mate con un gran amigo (vecino del barrio donde trabajo) durante esa media hora que separa la facultad del trbajo. Ese día, me di cúenta de aquello que nunca había registrado, por ser casi parte integrada de la misma rutina diaria, pero, que sin saber,era y es el único momento en el día que puedo distenderme y relajarme, sin tener que tomar notas en un cuaderno o responder al pie de la letra a mi jefe.
Creo que no siempre se necesitan (o al menos porque no se puede todo el tiempo) vaciones de 15, 20 o 30 días para poder distenderse,sino solo algunos minutos, en los momentos oportunos. Es podible que alguien pueda utilizar su hora de almuerzo del trabajo para comer frente a un lindo parque , o tomar mate con un amigo, o mirar vidrieras mentras se come un pancho, no se, son infinitas la pequeñas actividades que pueden ayudar a este propósito.
Creo que de esto se trata un poco toda la historia, de encontrar auqellos momentos o actividades que hacen que uno se desconecte y te ayudan a lograr un equilibrio entre la mente y el cuerpo.

Juan Manuel Bulacio dijo...

Sin dudas es así, Rocío y J.M., Para cerrar mi comentario de ayer: hoy jugué al fútbol con amigos, mi equipo diezmado por lesiones. Resultado: 0-5 No suena muy agradable, pero la semana próxima habrá revancha. Pensar en el partido perdido (Un poco, nomás, eh?) y en el próximo es un placer, porque nada muy importante está en juego, porque más allá de resultados pasamos un agradable momento, con amigos y haciendo de yapa algo bueno para el cuerpo.
Aunque cueste entenderlo a quienes no les gusta mucho, el fútbol y el deporte en equipo es excelente para mente, cuerpo y algo más también.
Eso sí, no me dio el tiempo para una nota en el blog. Mañana veremos. JMB

Anónimo dijo...

Cualquier tipo de deporte que nos desconecte un momento de nuestra rutina, preocupaciones, obligaciones etc., hace que tomemos conciencia de nuestro cuerpo, aunque sea por unos minutos y luego... el cuerpo lo agradece.
Saludos.