sábado, 3 de octubre de 2009

Peregrinación Juvenil a Luján

¿Qué maravillosas fuerzas mueven a un millón de jóvenes y no tanto a caminar 60 km. hasta Luján? Fé, aventura, desafío, experiencia...seguramente varias opciones más. Pero lo notable, en cualquier caso es la notable fuerza de voluntad y unidad de los caminantes, en busca de un mismo "objetivo". Si esa energía y motivación se unieran también cada día en la búsqueda de una sociedad mejor, ¿qué no podríamos lograr?
Recuerdo las primeras peregrinaciones juveniles, apenas entrando en la adolescencia, en los 70 y 80. La emoción que nos causaban. Somos los mismos pese a todo. Los cuarentones de hoy no lo deberíamos olvidar. Eramos "el futuro". Hoy tenemos más oportunidades que entonces de poner nuestros sueños en acción. Ojalá el peso de los años no nos lo haga olvidar. Somos los mismos! Demostrémoslo! JMB

1 comentario:

Rocío dijo...

Todos podemos ser ese peregrino, lleno de fe, esperanzas y entusiasmo, y seguramente lo somos o lo fuimos en algún momento de nuestras vidas. La dificultad es mantenerse en el camino que nos conduce a un mismo objetivo, frente a los avatares de la vida cotidiana y no caer tanto en el individualismo. De todas maneras prodríamos incluso tomar infinidad de diferentes caminos, logrando miles de suobjetivos y metas deseadas, pero que finalmente conduzcan al bien social, a la creación de una sociedad en la cual cada persona se sienta a gusto y pueda crecer. Todos queremos un mundo mejor, el tema es preguntarnos a nosotros mismos, desde lo más profundo de nuestro ser, si es que realmente hacemos algo para lograrlo. Seguramente hay mucha gente que sí, pero deberíamos ser más ambiciosos. Necesitamos ser muchos más.