sábado, 10 de octubre de 2009

Seguiremos autoengañándonos?

Excelente la nota de hoy en ADNcultura sobre el autoengaño.
No debemos olvidar que el hombre es contradictorio por naturaleza y que sus estados emocionales cambian a cada momento y con ellos la forma de ver el mundo. Pero eso no implica que debamos autoengañarnos, o sea, negar alguno de esos estados. Mucho podríamos hablar sobre este mecanismo psicológico, pero aquí solo quiero mencionar la superioridad que tiene aceptar la verdad y no hacernos trampas, sobre la mentira encubierta del autoengaño. Por supuesto no podemos siempre ser crudamente realistas, debemos dejar lugar a la ilusión, pero sabiendo lo que estamos haciendo. Casi siempre detrás del autoengaño hay una defensa ciega de nuestro ser, de nuestro narcisimo herido por la verdad. Pero la verdad permanecerá incólume, la admitamos o no. Lamentablemente, en nuestra sociedad, el engaño es moneda corriente y el autoengaño de las justificaciones y de la búsqueda de culpables afuera también. Tal vez seríamos más maduros como personas y como sociedad si nos mintiéramos menos. Hay que ser valientes y honestos para ello, pero ¿no es lo que acaso nos gustaría ser? Hasta pronto. JMB

7 comentarios:

Jime dijo...

somos contradictorios pero al mismo tiempo,

que aburridos seríamos si no lo fuéramos, no?

Anónimo dijo...

Una vez alguien le pidió a un filósofo español, Julián Marías, muy conocedor del pueblo argentino y de sus costumbres y, con un gran cariño por nosotros, que hablara de los argentinos, pero con visión desde fuera del bosque y de toda pasión...

Esto fue lo que dijo:

'Los argentinos están entre vosotros, pero no son como vosotros. No intentéis conocerlos, porque su alma vive en el mundo impenetrable de la dualidad.
Los argentinos beben en una misma copa la alegría y la amargura.
Hacen música de su llanto -el tango- y se ríen de la música de otro; toman en serio los chistes y de todo lo serio hacen bromas. Ellos mismos no se conocen. Creen en la interpretación de los sueños, en Freud y el horóscopo chino, visitan al médico y también al curandero todo al mismo tiempo.
Tratan a Dios como 'El Barba' y se mofan de los ritos religiosos, aunque los presidentes no se pierden un Tedeum en la Catedral.
No renuncian a sus ilusiones ni aprenden de sus desilusiones.
No discutáis con ellos jamás!!! Los argentinos nacen con sabiduría!!!
Saben y opinan de todo!!! En una mesa de café y en programas de periodistas / políticos arreglan todo.
Cuando los argentinos viajan, todo lo compara con Buenos Aires.
Hermanos, ellos son 'El Pueblo Elegido'...por ellos mismos.
Individualmente, se caracterizan por su simpatía y su inteligencia. En grupo son insoportables por su griterío y apasionamiento.
Cada uno es un genio y los genios no se llevan bien entre ellos; por eso es fácil reunirlos, pero unirlos.... imposible.
Un argentino es capaz de lograr todo en el mundo, menos el aplauso de otros argentinos.
No le habléis de lógica. La lógica implica razonamiento y mesura.
Los argentinos son hiperbólicos y desmesurados, van de un extremo a otro con sus opiniones y sus acciones.
Cuando discuten no dicen 'no estoy de acuerdo', sino 'Usted esta absolutamente equivocado'.
Aman tanto la contradicción que llaman 'Bárbara' a una mujer linda; a un erudito lo bautizan 'Bestia', a un mero futbolista 'Genio' y cuando manifiestan extrema amistad te califican de 'Boludo'. Y si el afecto y confianza es mucho más grande, 'Eres un Hijo de Puta'.
Cuando alguien les pide un favor no dicen simplemente 'Si', sino 'Como No'.
Son el único pueblo del mundo que comienza sus frases con la palabra NO. Cuando alguien les agradece, dicen: 'NO, de nada' o 'NO'... con una sonrisa.
Los argentinos tienen dos problemas para cada solución. Pero intuyen las soluciones a todo problema.
Cualquier argentino dirá que sabe como se debe pagar la deuda externa, enderezar a los militares, aconsejar al resto de América latina, disminuir el hambre de Africa y enseñar economía en USA.
Los argentinos tienen metáforas para referirse a lo común con palabras extrañas. Por ejemplo, a un aumento de sueldos le llaman... 'Rebalanceo de Ingresos', a un incremento de impuestos, 'Modificación de la Base Imponible ' y a una simple devaluación, 'Una Variación Brusca del Tipo de Cambio'. Un Plan Económico es siempre 'Un Plan de Ajuste' y a una Operación Financiera de Especulación la denominan, 'Bicicleta'.
Viven, como dijo Ortega y Gasset, una permanente disociación entre la imagen que tienen de si mismos y la realidad.
Tienen un altísimo numero de psicólogos y psiquiatras y se ufanan de estar siempre al tanto de la última terapia.
Tienen un tremendo súper ego, pero no se lo mencionen porque se desestabilizan y entran en crisis.
Tienen un espantoso temor al ridículo, pero se describen a si mismo como liberados.
Son prejuiciosos, pero creen ser amplios, generosos y tolerantes.
Son racistas al punto de hablar de 'Negros o Judios de mierda' o 'cabecitas Negras'.
LOS ARGENTINOS SON ITALIANOS QUE HABLAN EN ESPAÑOL. PRETENDEN SUELDOS NORTEAMERICANOS Y VIVIR COMO INGLESES. DICEN DISCURSOS FRANCESES Y VOTAN COMO SENEGALESES. PIENSAN COMO ZURDOS Y VIVEN COMO BURGUESES. ALABAN EL EMPRENDIMIENTO CANADIENSE Y TIENEN UNA ORGANIZACIÓN BOLIVIANA. ADMIRAN EL ORDEN SUIZO Y PRACTICAN UN DESORDEN TUNECINO.

Son 'Un Misterio'.......


Ana María Paz

Anónimo dijo...

UN MONÓLOGO DEL GENIAL TATO BORES.....Y es válido.

'Qué país! ¡Qué país! ¡No me explico por qué nos despelotamos tanto...si éramos multimillonarios!'
Ud. iba y tiraba un granito de maíz y ¡ paf !, le crecían diez hectáreas....
Sembraba una semillita de trigo y ¡ ñácate !, una cosecha que había que tirar la mitad al río porque no teníamos dónde meterla...
Compraba una vaquita, la dejaba sola en el medio del campo y al año se le formaba un harén de vacas...
Créame, lo malo de esta fertilidad es que una vez, hace años, un hijo de puta sembró un almácigo de boludos y la plaga no la pudimos parar ni con DDT. Aunque la verdad es que no me acuerdo si fue un hijo de puta que sembró un almácigo de boludos, o un boludo que sembró un almácigo de hijos de puta.'

Ana María Paz

Verito dijo...

Creo que los seres humanos que vivimos en esta sociedad tan compleja a menudo queremos dar una imagen hacia afuera que no podemos sostener ante nosotros mismos. Fabricamos discursos e ideales decadentes que no convencen a nadie, falsos como moneda de tres pesos, pero que no podemos dejar de exhibir como si además fuesen una victoria. Para funcionar en ese mundo de fantasía sin contradicciones, deberíamos volvernos absolutamente básicos, no pensar, ser autómatas. Pero no somos tan simples y a veces no tenemos cómo "encajar" si no es acallando algunas partes de nuestra capacidad de análisis -tan particular-, por lo menos de la boca para afuera. El problema del engaño permanente es que terminamos comprando lo que vendemos, es decir, nos creemos lo que decimos. Y cuando el autoengaño es muy grueso, es muy costoso pagar los viáticos de regreso al interior de uno mismo. Lo que cuesta no es para todos, ésa es la verdad. Los sacrificios son duros, y no cualquiera puede soportarlos. Pero si no los asumimos, caemos en esas crisis terminales que tan bien conocemos. Así que creo que sí, muchos seguiremos autoengañándonos y otros tantos haremos el esfuerzo. Quién termina su historia de un lado o del otro, es una incógnita con final abierto. Dolería pensar que por lo menos no lo hemos intentado.

Maga h dijo...

Sin duda, pero como contradictorios, naturalmente complicados, y tal vez como dice Jime, esto es lo que nos hace menos aburridos, pero a veces los errores son tan grandes que debieramos trabajar para conocernos mejor.

Un abrazo

MAGAH

Juan Manuel Bulacio dijo...

Gracias Jime y bienvenida, efectivamente las contradicciones son parte de la vida y la hacen más divertida si sabemos manejarlas.
Ana María, siempre sos bienvenida en este sitio. Creo que los argentinos tenemos mucho de lo que citás, pero creo que también tenemos otras cosas valiosas pugnando por salir. Y no pierdo la esperanza.
Verito y Magah, gracias por participar y dejarnos sus valiosos comentarios. Trabajar sobre uno mismo es fundamental para al menos conocer nuestras contradicciones y tratar que no se expresen en forma perjudicial para nosotros mismos y para nuestra sociedad. Beso/abrazo para todos. JMB

Jime dijo...

gracias Juan Manuel, me encantó reencontrarte,

fuiste docente mio en la carrera de postgrado de psiquiatría en el Francés, y ahora descubro que tenés un blog!

las vueltas de la vida...